En la comunidad de El Semillero, ubicada en el municipio de Gaspar Hernández, provincia Espaillat, un niño de nueve años falleció durante la madrugada del sábado debido a un incendio que consumió completamente su vivienda. El menor fue identificado como Alfredo Hernández Tavares, y su cuerpo fue encontrado totalmente calcinado en el centro de la casa, la cual quedó destruida por el fuego.
Vecinos del lugar expresaron su consternación al relatar que el chiquito estaba solo cuando se inició el incendio. La vivienda donde ocurrió el suceso estaba construida con materiales ligeros, lo que facilitó la rápida propagación de las llamas. Además, la casa funcionaba como almacén de botellas reciclables, que la madre del menor recogía para mantener a la familia, una situación que probablemente aceleró el desarrollo del fuego.
Hasta ahora, las causas específicas que originaron el incendio no han sido determinadas. Por esta razón, las autoridades del Cuerpo de Bomberos junto con el Ministerio Público han comenzado las investigaciones correspondientes para esclarecer lo sucedido. Este proceso busca encontrar respuestas sobre cómo se inició el fuego y las circunstancias que rodearon el evento.
La comunidad local se encuentra profundamente afectada por la pérdida de Alfredo, a quien describen como un niño alegre y respetuoso. Su fallecimiento ha dejado un gran vacío entre los vecinos, quienes han mostrado solidaridad con la familia en estos momentos difíciles. En particular, han solicitado apoyo para la madre del menor, ya que tras este lamentable evento quedó en una situación de extrema vulnerabilidad, sin su hijo y sin el único hogar que tenían.
La historia ha generado un llamado a la solidaridad, resaltando la necesidad de acompañar a esta familia en su dolor y necesidad. El caso pone en evidencia las dificultades que enfrentan muchas personas en zonas rurales, donde las viviendas son precarias y los medios para subsistir limitados, aumentando la vulnerabilidad ante este tipo de siniestros.
Las autoridades continúan con las labores de investigación para determinar con exactitud las causas del incendio y evitar que sucesos similares se repitan en la zona. Mientras tanto, la comunidad y organizaciones locales trabajan para brindar asistencia a la familia afectada, intentando aliviar el impacto de esta tragedia.