El Ministerio Público comunicó este jueves la detención de Antonio y Maribel Espaillat, quienes figuran como propietarios y responsables administrativos del centro de entretenimiento Jet Set. Ambos están siendo investigados en el marco del proceso legal relacionado con el colapso del techo del local ocurrido el pasado 8 de abril.

Según la información oficial emitida por la institución, se atribuye a los hermanos una conducta caracterizada por una “irresponsabilidad y negligencia grave”. Esta calificación se basa en que, de acuerdo con las investigaciones preliminares, no llevaron a cabo las acciones estructurales necesarias que habrían podido evitar el desplome de la edificación.

El colapso registrado ese día tuvo un saldo trágico, dejando sin vida a 236 personas y causando lesiones a más de 180. Se considera uno de los hechos más lamentables de los últimos tiempos en el país, por la magnitud del impacto humano y social que generó.

El documento emitido por las autoridades detalla que “ambos imputados omitieron adoptar medidas urgentes y adecuadas para salvaguardar la integridad de clientes y empleados, a pesar de tener conocimiento del deterioro de la estructura”. Esta declaración sustenta la acusación en curso contra los responsables del establecimiento.

Eso no es todo, ya que los señalados también enfrentan graves acusaciones por intento de manipulación e intimidación a testigos, en el marco de la investigación por el colapso del techo del establecimiento ocurrido el pasado 8 de abril. El documento legal, sustentado por el procurador adjunto Wilson Camacho, señala que los imputados no solo omitieron las medidas necesarias para prevenir el desastre, sino que también intentaron influir en empleados de la discoteca para alterar o suprimir información relevante para el caso.

La detención de los hermanos Espaillat fue ejecutada después de haber sido interrogados por el procurador adjunto Wilson Camacho, quien dirige la Dirección General de Persecución del Ministerio Público. Posteriormente, se anunció que ambos serán presentados en las próximas horas ante un juez de atención permanente del Distrito Nacional, con el propósito de determinar las medidas de coerción correspondientes.

El caso ha sido objeto de amplia atención pública debido a la gravedad del hecho y a las consecuencias derivadas del desplome. El proceso judicial continúa en desarrollo, con el objetivo de esclarecer los niveles de responsabilidad implicados, tanto a nivel estructural como administrativo.

WILSON CAMACHO
WILSON CAMACHO

Las investigaciones siguen en curso, y las autoridades han manifestado su intención de continuar recabando pruebas y declaraciones para respaldar el expediente. Se espera que en los próximos días se produzcan nuevas acciones judiciales que podrían ampliar el alcance de las responsabilidades por lo sucedido en la discoteca Jet Set.