Tribunal de La Altagracia dictó sentencia por caso ocurrido en enero de 2024.
VERÓN, PUNTA CANA.– El Tribunal del Distrito Judicial de La Altagracia condenó a 30 años de prisión a Carmen Jiménez, hallada culpable de haber maltratado hasta causar la muerte a su sobrino de 9 años, Christopher Jiménez, en un hecho ocurrido el 13 de enero del año 2024.
La sentencia fue emitida tras conocerse en audiencia que la imputada sometió al menor a actos de violencia que derivaron en su fallecimiento.
El tribunal determinó que existían pruebas suficientes para establecer la responsabilidad penal de Carmen Jiménez en este lamentable suceso.
El caso ocurrió en la comunidad de Verón, en el municipio turístico de Punta Cana. Desde el inicio del proceso judicial, la muerte del niño causó conmoción tanto en el entorno local como en sectores preocupados por la protección de menores.
Según lo establecido por el tribunal, Carmen Jiménez deberá cumplir la pena máxima de 30 años en un centro penitenciario, conforme a lo establecido por la legislación penal dominicana en casos de homicidio agravado y violencia contra menores.
El fallo judicial fue comunicado tras varias sesiones de audiencia, donde se presentaron testimonios, pruebas forenses y otros elementos que respaldaron la acusación formulada por el Ministerio Público en contra de la hoy condenada.
Durante el proceso, se detalló que el menor Christopher Jiménez había estado bajo la custodia de su tía al momento de los hechos. Las circunstancias del maltrato fueron evaluadas por peritos y especialistas, cuyas conclusiones fueron incorporadas al expediente.
El tribunal declaró que la conducta mostrada por Carmen Jiménez constituyó una violación grave a los derechos fundamentales del niño. Por ello, procedió a imponer la pena máxima establecida para este tipo de delitos.
Con esta decisión, el Tribunal del Distrito Judicial de La Altagracia concluyó uno de los casos más sensibles registrados en la zona durante el año 2024, relacionado con violencia intrafamiliar y responsabilidad penal en el cuidado de menores.
No se ofrecieron más detalles sobre reacciones de familiares ni sobre posibles apelaciones por parte de la defensa. La condena de 30 años queda establecida como la sentencia firme dictada hasta ahora en este caso.