Rubby Pérez protagonizó la telenovela Amor de Hembra en los 90, uniendo música y actuación en una historia que conquistó al público venezolano.
En la década de los años 90, el reconocido merenguero dominicano Rubby Pérez sorprendió a sus seguidores al dar un giro inesperado en su carrera artística.
Más allá de su potente voz, conocida por todos como “la voz más alta del merengue”, Rubby demostró su versatilidad al incursionar en el mundo de la actuación, convirtiéndose en protagonista de la telenovela venezolana Amor de Hembra.
Transmitida por el canal Venevisión, esta telenovela fue muy especial, ya que combinaba dos elementos poco comunes en ese momento: el drama tradicional de las telenovelas y la música tropical.
Este enfoque innovador logró conectar rápidamente con el público, no solo por su historia emocionante, sino también por la presencia del popular cantante dominicano.
En Amor de Hembra, Rubby Pérez compartió pantalla con la reconocida actriz venezolana Tatiana Capote. Juntos formaron una pareja protagónica que capturó la atención de los televidentes desde el primer capítulo.
La historia se centraba en un intenso romance marcado por desafíos y emociones, donde la música jugaba un papel clave, integrándose de manera natural en la vida de los personajes. Esto permitió que Rubby no solo actuara, sino que también interpretara canciones dentro de la trama, mostrando su talento en más de una faceta.
La participación de Rubby Pérez en esta producción televisiva marcó un antes y un después en su carrera. No solo fue una oportunidad para demostrar que su arte iba más allá de los escenarios musicales, sino que también le abrió puertas en el mundo del entretenimiento venezolano.
Gracias a Amor de Hembra, Rubby logró fortalecer su vínculo con el público de ese país, aumentando su popularidad y ganándose el cariño de muchas personas que tal vez no lo conocían como cantante, pero lo admiraron como actor.
Este proyecto se suma a la lista de logros que han definido la carrera de Rubby Pérez, quien con esfuerzo, talento y carisma ha dejado una huella profunda en el arte latinoamericano.
Su paso por la televisión venezolana es recordado como un momento importante en su trayectoria, y como prueba de que un verdadero artista puede brillar en diferentes escenarios, siempre con pasión y entrega.